Con estas nuevas tendencias de organización, se logra una cocina más ordenada, higiénica y funcional.
Si todavía colgás los trapos de cocina en la puerta del horno, es momento de modernizar tu cocina con soluciones más prácticas y estéticas. Aunque este método fue utilizado por generaciones, en la actualidad existen alternativas más eficientes para mantener el orden, evitar la humedad y mejorar la higiene.
A continuación, te contamos cuáles son las mejores formas de guardar los trapos de cocina sin ocupar espacio innecesario y sin que terminen desparramados por la mesada.
La nueva tendencia: barras extensibles y colgadores sin perforaciones
Uno de los métodos más prácticos y modernos para organizar los trapos de cocina es el uso de barras o colgadores extensibles. Estas barras o colgadores se enganchan en los bordes de los muebles sin necesidad de tornillos ni adhesivos, aprovechando su propio peso para mantenerse en su lugar.
Algunas de sus ventajas son:
- Fácil instalación: no requiere herramientas ni agujeros en los muebles.
- Adaptabilidad: se extiende según el tamaño del armario o cajón.
- Mayor higiene: evita que los trapos se acumulen en superficies húmedas o queden expuestos a la suciedad.
Otras opciones modernas para guardar los trapos
Si buscás alternativas más versátiles, también podés optar por:
- Ganchos adhesivos: son una opción económica y fácil de instalar en la parte interna de las puertas de los armarios. De esta manera, los trapos quedan ocultos pero accesibles cuando los necesitás.
- Colgadores tipo barra imantada: se adhieren a la heladera o superficies metálicas sin necesidad de perforaciones.
- Cajones organizadores: si preferís que los trapos no estén a la vista, podés asignar un cajón específico y organizarlos con separadores para mantenerlos prolijos y listos para usar.
Beneficios de abandonar la puerta del horno como colgador
Colgar los trapos en la puerta del horno puede parecer una solución práctica, pero tiene varias desventajas. Además de ser poco estético, favorece la acumulación de grasa y humedad, lo que puede generar olores desagradables y propiciar la proliferación de bacterias.
Consejo extra: para mantener los trapos limpios por más tiempo, se recomienda lavarlos regularmente con agua caliente y un poco de vinagre blanco para eliminar olores y bacterias.