Las intensas precipitaciones ha casi todo el territorio, provocando inundaciones, deslizamientos y el colapso de infraestructuras
Casi 20.000 personas han sido afectadas por las lluvias en Ecuador desde el inicio del año, según el más reciente informe de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR). La emergencia, que ha golpeado a 23 de las 24 provincias del país, ha provocado 914 eventos adversos, entre los que destacan deslizamientos de tierra (43,33%), inundaciones (35,56%) y colapsos estructurales (5,69%).
La SNGR ha declarado alerta roja en seis provincias de la Costa ecuatoriana y ha extendido la emergencia regional por 60 días en ocho territorios.
Hasta la fecha, se reportan 19.969 personas afectadas, 1.602 damnificadas y nueve fallecidas. Además, 5.913 viviendas han sufrido daños y 35 han sido destruidas. La infraestructura vial también ha sido gravemente impactada, con 25,33 kilómetros de carreteras afectadas y 12 puentes dañados o destruidos. Entre los sectores más golpeados se encuentran Guayas, Manabí, Los Ríos, El Oro, Chimborazo, Cotopaxi y Esmeraldas.
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Las lluvias han provocado el desbordamiento de 17 cuerpos de agua y han puesto en riesgo otros 25, con una tendencia creciente en varias zonas. Las provincias con mayor impacto en la población son Guayas, con 7.446 personas afectadas, Manabí con 6.221 y Los Ríos con 3.334. En estas áreas, las inundaciones han cubierto viviendas, carreteras y cultivos, dejando a cientos de familias incomunicadas.
El Gobierno Nacional, a través del Comité de Operaciones de Emergencia (COE), ha activado tres COE provinciales y 34 cantonales para coordinar la respuesta a la crisis. También se han habilitado cuatro albergues temporales en El Oro, Manabí y Pichincha, donde se refugian más de 120 personas. En estos espacios se ha distribuido asistencia humanitaria, incluyendo 21.384 bienes de primera necesidad como kits de alimentos, colchones y frazadas.
El impacto de la temporada invernal se ha reflejado en la destrucción de cultivos y la pérdida de ganado. Hasta ahora, 820 hectáreas de cultivos han sido afectadas y 854 hectáreas han sido completamente arrasadas. Además, se han registrado más de 45.000 animales muertos debido a las inundaciones y deslizamientos de tierra.
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En la provincia de Manabí, las lluvias han causado estragos significativos, con varias comunidades completamente anegadas. En Portoviejo, el desbordamiento del río Chico obligó a la evacuación de decenas de familias, mientras que en Calceta, la creciente del río Mosca afectó a viviendas, dos unidades educativas y un centro de salud. En la ciudadela Fátima, un deslizamiento de tierra destruyó una vivienda y dejó cuatro personas fallecidas.
Las autoridades meteorológicas han advertido que las lluvias continuarán en los próximos días, con especial intensidad en la región Litoral y la Amazonía. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI) ha emitido la advertencia No. 11, que indica alta probabilidad de precipitaciones intensas en Guayas, Los Ríos, El Oro y Esmeraldas.
Para enfrentar la emergencia, el Gobierno ha movilizado fondos y personal adicional en las provincias más afectadas. La SNGR ha declarado emergencia regional en Guayas, Los Ríos, Manabí, El Oro, Esmeraldas, Santa Elena, Loja y Azuay, lo que permitirá agilizar los recursos para asistencia humanitaria y reconstrucción.
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El último reporte indica que 14 ríos están desbordados y otros 25 tiene riesgo de crecer.
Las autoridades han recomendado evitar desplazamientos innecesarios y mantenerse informados a través de los canales oficiales. Se ha pedido a los gobiernos locales reforzar los sistemas de drenaje y activar planes de contingencia para evitar más pérdidas humanas y materiales.
El COE Nacional se mantiene en sesión permanente, evaluando nuevas medidas para mitigar el impacto de la crisis climática. Se ha solicitado al Ministerio de Defensa el despliegue de personal y equipos en las zonas más golpeadas, así como la activación de líneas de crédito para la recuperación económica de los sectores afectados.