Un grupo de investigadores británicos ha desarrollado un material innovador capaz de cerrar grietas automáticamente, prometiendo reducir costos de mantenimiento y mejorar la seguridad vial
El mantenimiento de las carreteras es un desafío constante en todo el mundo. La formación de baches no solo genera gastos millonarios en reparaciones, sino que también representa un peligro para los automovilistas. Sin embargo, un grupo de investigadores del Reino Unido ha desarrollado un material revolucionario capaz de reparar automáticamente las grietas en la superficie de las rutas, prolongando su vida útil.
Un material que se repara solo
![Un equipo internacional de científicos](https://www.infobae.com/resizer/v2/YDCLRZB5HNGOZEPME25OFH6O5Y.jpg?auth=4e16a0c8768f9df537ce6005bd7a9512fbc6dcc68a6eaeb08fd583957f504d12&smart=true&width=350&height=197&quality=85)
Un equipo internacional de científicos diseñó un betún autorreparable que puede fusionar el asfalto al detectar grietas incipientes. Este avance promete prevenir la formación de baches y mejorar la durabilidad de las carreteras sin intervención humana. En pruebas de laboratorio, el material fue capaz de reparar pequeñas fracturas en solo una hora.
El Dr. José Norambuena-Contreras, investigador de la Universidad de Swansea y uno de los líderes del proyecto, explicó a The Guardian la importancia de esta innovación: “Al cerrar las grietas se evita que se formen baches en el futuro y se alarga la vida útil de la carretera. Podemos alargar la vida útil de la superficie en un 30%”.
Cómo funciona el betún autorreparable
El mecanismo detrás de esta tecnología es ingenioso. Los investigadores mezclaron betún con pequeñas esporas de plantas porosas impregnadas con aceites reciclados. Cuando los vehículos pasan sobre la superficie, la presión hace que las esporas liberen el aceite, el cual actúa ablandando el betún y permitiendo que fluya para sellar las grietas.
Este proceso imita la acción de los materiales autorreparables utilizados en otras industrias, como los polímeros con microcápsulas de adhesivo que se utilizan en la fabricación de plásticos y recubrimientos. La diferencia clave es que, en este caso, el betún puede mantener su integridad estructural a lo largo del tiempo, reduciendo la necesidad de intervenciones externas.
Beneficios e impacto potencial
El desarrollo de este material podría significar un cambio radical. Actualmente, la reparación de carreteras implica grandes costos en mano de obra, materiales y maquinaria, además de causar interrupciones en el tráfico.
Entre los principales beneficios de esta tecnología, se encuentran:
- Reducción de costos de mantenimiento: al prolongar la vida útil de las carreteras en un 30%, se reduciría la frecuencia de reparaciones.
- Menor impacto ambiental: el uso de aceites reciclados en la composición del material contribuye a una solución más ecológica.
- Mejora en la seguridad vial: menos baches significan menos accidentes y daños a los vehículos.
- Optimización del tiempo de viaje: al evitar cierres por reparaciones constantes, se agiliza el tráfico y se mejora la experiencia de los conductores.
Costos de reparación de baches en el Reino Unido
![El Reino Unido ha gastado](https://www.infobae.com/resizer/v2/UMZRQGXOG5CADI253OT4TUHLEU.jpg?auth=d616af42921cbba1ca5d621aaf91e15964981b086f9c8cbaf6b377855d0ee188&smart=true&width=350&height=197&quality=85)
El problema de los baches en las carreteras británicas ha alcanzado niveles alarmantes. Según la Asociación Automovilística (AA), en 2023 se gastaron 579 millones de libras (722 millones de dólares) en la reparación de vehículos dañados por baches, un incremento significativo respecto a los 474 millones de libras (591 millones de dólares) de 2022.
Ante esta situación, el gobierno británico ha anunciado una inversión de 1.600 millones de libras para reparar más de 7 millones de baches en Inglaterra este año. La secretaria de Transporte, Heidi Alexander, declaró que estos desperfectos han “plagado a los automovilistas durante demasiado tiempo” y que es fundamental encontrar soluciones duraderas.
Los baches suelen originarse a partir de pequeñas grietas superficiales que se agrandan con el tiempo debido al peso del tráfico ya las condiciones climáticas. Cuando el agua se filtra en las grietas y se congela, la expansión del hielo agrava el daño, lo que eventualmente provoca el desprendimiento del asfalto y la formación de baches peligrosos.
Inteligencia artificial en el desarrollo del material
Para optimizar la eficacia del betún autorreparable, los investigadores recurrieron al aprendizaje automático, una rama de la inteligencia artificial.
Con la colaboración del King’s College de Londres y Google Cloud, utilizaron modelos computacionales avanzados para analizar el movimiento de las moléculas orgánicas dentro del betún y simular su comportamiento ante la aparición de grietas.
Gracias a estas simulaciones, los científicos lograron identificar la mejor combinación de esporas y aceites reciclados para maximizar la capacidad de sellado del material. La inteligencia artificial permitió predecir con gran precisión cómo respondería el betún en diferentes condiciones de tráfico y clima, lo que aceleró el proceso de desarrollo y pruebas de laboratorio.
¿Cuándo se verá este material en las carreteras?
Los investigadores creen que esta tecnología podría implementarse en las carreteras británicas en un par de años. Actualmente, están trabajando en pruebas a mayor escala para evaluar su rendimiento en condiciones reales de tráfico.
National Highways, la agencia encargada de la operación y mantenimiento de las principales carreteras de Inglaterra, ha mostrado interés en esta innovación y está invirtiendo en tecnologías de autorreparación vial.
“Desde la predicción de dónde se necesita mantenimiento en la red vial real hasta la autorreparación de las superficies de las carreteras, National Highways se compromete a utilizar la tecnología para hacer que nuestras autopistas y carreteras principales sean más seguras y ecológicas en el futuro”, señaló un portavoz de la entidad, de acuerdo a la publicación de The Guardian.
La introducción de esta tecnología no solo mejoraría la infraestructura vial, sino que también facilitaría la gestión de los recursos públicos destinados al mantenimiento de carreteras.
Un futuro sin baches está más cerca
La posibilidad de carreteras autorreparables representa un avance significativo en la ingeniería vial. Si esta tecnología logra aplicarse a gran escala, podría reducir costos, mejorar la seguridad y hacer más eficiente el tránsito en el Reino Unido y, potencialmente, en otras partes del mundo.
El desarrollo de materiales inteligentes como este betún autorreparable demuestra el impacto positivo que la ciencia y la tecnología pueden tener en problemas cotidianos. A medida que las pruebas continúan, la expectativa de un futuro con menos baches y carreteras más resistentes podría convertirse en una realidad en un plazo más corto de lo que se imagina.