Martín Ku dejó la casa de Gran Hermano 2023 (Telefe) y se trasladó a un hotel, donde permaneció algunos días. Luego volvió a su hogar y de a poco retomó el contacto con sus seres queridos, además de la vida en pareja con Marisol, que en realidad se llama María del Rosario. Sin embargo, todavía tienen dificultades a la hora de hacer el amor y él lo explicó con lujo de detalles en diálogo con Martín Cirio.
El exjugador contó que al no vivir con ella, se le hace difícil dejarse llevar por la pasión, por lo que están pensando en ir a un hotel alojamiento. “No tuvimos nuestro momento muy a solas. En mi casa están mis viejos y no podemos hacer mucho ruido. No es lo mismo estar solos solos, que podés hacer lo que querés. Capaz vayamos a un telo. Ya tuvimos sexo, pero no con la máxima comodidad”, se le escuchó decir.
El entrenador y la profesora de inglés seguramente puedan crear un nidito de amor pronto junto a Arturo, el perro que él adoptó en el programa. Al menos ya tienen una casa prefabricada que el joven ganó en uno de los desafíos, aunque todavía no definieron dónde instalarla.
Se supo qué pasó con las casas que les prometieron a los finalistas de Gran Hermano 2023
Este domingo termina Gran Hermano 2023 y los tres finalistas recibieron una noticia devastadora. Santiago del Moro les comunicó que solo el campeón se llevará una casa prefabricada y tanto el segundo como tercer puesto una moto, cerveza y dinero. Esto no solo sorprendió a los participantes, también desató un escándalo en las redes sociales, ya que el 11 de diciembre fue él mismo quien confirmó que los últimos en salir del juego tendrían una vivienda.
En medio del revuelo, el presentador se reportó en su cuenta de Instagram para poner paños fríos y terminar con las acusaciones de fraude. “Todo listo para la final. Vale aclarar, para los que me preguntaban, que (los finalistas) tendrán la oportunidad de elegir el dinero o la casa”, expresó en referencia al tercer lugar y al subcampeón.
Varios usuarios no se quedaron conformes con su explicación y mencionaron que las propiedades que se prometieron y ya no están son las que les entregaron a Martín Ku y Delfina, la hija de Virginia Demo. “Se las patinaron”, “Qué desastre”, “Tremendo cómo robaron”, fueron algunas de las críticas lapidarias que se leyeron.