Luego de la escapada de Mauro Icardi y la China Suárez a Italia, la conductora quiso alejarse de los conflictos y junto al músico armó las valijas para descansar cerca del mar
Mientras Mauro Icardi y la China Suárez disfrutan de su viaje por Europa, Wanda Nara y L-Gante decidieron alejarse del ruido mediático y pasar unos días de descanso en Pinamar junto a sus respectivas hijas, Francesca, Isabella, fruto de la relación de la conductora con el futbolista, y Jamaica, por parte del músico y Tamara Báez. Tras la presentación del nuevo tema de Elián Valenzuela el miércoles por la noche, Wnada y su pareja decidieron armar las valijas y alejarse del bullicio del mundo del espectáculo. Y, si bien intentaron mantener un bajo perfil, lo cierto es que no pasó mucho tiempo para que su escapada saliera a la luz.
Según reveló Marcela Tauro en Intrusos (América), Wanda y L-Gante llegaron a Pinamar en la mañana del jueves y se instalaron en una casa alquilada especialmente para su estadía, sobre la playa. La mediática se habría encargado personalmente de organizar la reserva y de asegurarse de que cada detalle estuviera a su gusto. “Pidieron que los esperen con gaseosas y papas fritas”, comentó Tauro, dejando en claro que no faltó ninguna comodidad para recibirlos. Por su parte, Karina Iavícoli agregó que la empresaria tenía planeado viajar con algunos de sus hijos, confirmando así la presencia de las hijas que tuvo con Icardi, junto a Jamaica, la hija del artista. “Iba a ir unos días con algunos de los hijos”, afirmó la panelista, reforzando la idea de que este viaje estaba en los planes de Nara desde hace tiempo.
Minutos después, Yanina Latorre filtró imágenes que confirmaron la presencia del grupo en un exclusivo parador de la ciudad balnearia. En una de las fotos, se la puede ver a Wanda, con lentes de sol y vestida de blanco, sentada en una mesa junto al músico, mientras las nenas disfrutan del almuerzo. En otra toma, la empresaria aparece sacándose selfies con su celular, con la playa de fondo y sus hijas a su alrededor.
Mientras tanto, Nara optó por compartir en sus redes solo imágenes familiares, dejando fuera de sus historias al referente de cumbia 420 y evitando referencias directas a la controvertida relación que ambos mantienen. En una de las fotos, se pudo ver a Francesca dentro del auto, sonriente y sosteniendo una tabla de surf infantil con diseño de pirata, mientras a su lado hay varios juguetes de playa.
Más tarde, la empresaria publicó otra postal de su hija recostada en un cómodo sillón blanco frente al mar, con una gorra de Hello Kitty y una mochila infantil de Frozen a su lado. En primer plano, se aprecia un plato de ensalada con pollo y panceta, dejando en evidencia que estaban disfrutando de un almuerzo junto al mar.
Las imágenes no tardaron en causar revuelo. A poco tiempo de su estadía en el exclusivo balneario bonaerense, una multitud se agolpó en la orilla para ver a la pareja con sus niñas. En un momento de la tarde, Wanda y L-Gante bajaron al mar, junto a su familia y la gente no paró de pedirles fotos y abrazarlos. La tranquilidad del balneario se vio alterada por la presencia de la dupla, quien se sacó selfies con todos los que se lo pidieron, y conversaron animadamente con los veraneantes. De muy buen humor se los pudo ver disfrutar del clima cálido de fines de enero, y disfrutar de su amor libremente.
Mientras la empresaria disfruta de su descanso en la costa junto al cantante y las tres menores, las especulaciones sobre su vida sentimental y la disputa con Icardi no cesan. Sus publicaciones en redes muestran momentos familiares y de relax, pero las teorías y las preguntas siguen flotando en el aire. Por ahora, la empresaria parece decidida a esquivar las polémicas y seguir adelante con su estilo inconfundible: dejando que las imágenes hablen por ella en medio de las versiones y críticas que azotan al mundo del espectáculo desde que anunció su separación definitiva del padre de sus hijas.
