Dos subsecretarios (Educación y Coordinación de Gabinete Económico), cargos de segunda línea en el Ejecutivo provincial, encabezan esta polémica lista de una gestión que se tilda de austera y que vino a cambiar la forma de hacer política.
El candidato a diputado provincial por la lista 652 del Frente Chaco Merece Más, Sebastián Benítez Molas calificó de “bochornoso” el gasto en viáticos de funcionarios provinciales a lo largo de este 2025, informe del cual se desprende que un técnico cobra más que el mismo gobernador en este sentido. “Los paladines de la austeridad y el orden financiero con gastos millonarios en viáticos”, sentenció.
El gobierno de Leandro Zdero ya desembolsó más de 65 millones de pesos en viáticos para sus funcionarios entre enero y el 24 de abril del 2025, según registros oficiales de la Tesorería Provincial. El dato no sólo evidencia un gasto considerable en movilidad estatal, sino también un uso llamativo y desigual de los fondos públicos: nueve funcionarios de menor jerarquía superaron al propio gobernador en gastos de traslado.
Uno de los casos más controvertidos es el de Isabel Sanchuk, titular de la Subsecretaría de Educación y el de Guillermo Agüero, subsecretario de Coordinación de Gabinete Económico, quien figura como el segundo mayor beneficiario de estos fondos, apenas por debajo de la funcionaria de la cartera de Educación. Agüero recibió $7.046.690 en viáticos en sólo cuatro meses, mientras que Sanchuk percibió unos 18 mil pesos más (7.064.159,20 pesos). El del área económica, se trata de un cargo técnico sin funciones ejecutivas territoriales, pero que promedia más de 1.760.000 pesos por mes sólo en anticipos para viajes.
En contraste, el gobernador cobró 2.322.450 pesos en el mismo período, un tercio de lo que embolsó Agüero.
“Hay funcionarios que deberían estar en su escritorio, pero terminan viajando más que el gobernador. Eso no se puede justificar desde ningún punto de vista”, advirtió Sebastián Benítez Molas. Fue más allá y dijo: “El problema no es sólo ético, es también estructural. Hay un descontrol evidente en la política de viáticos. Lo que debería ser una herramienta para la gestión se convirtió en un esquema de sobresueldos encubiertos”.
La magnitud del desvío salta a la vista cuando se comparan las cifras: el salario mínimo en Argentina es de $202.800, mientras que un docente cobra en promedio unos $900.000 mensuales. Agüero, en cambio, recibió en viáticos el equivalente a más de 9 meses de sueldo docente en solo 4 meses, sin contar su salario oficial. “En una provincia con más del 60% de pobreza, estos números son una cachetada. Los viáticos dejaron de ser una excepción y pasaron a funcionar como un complemento habitual del ingreso. Eso distorsiona toda lógica de austeridad”, agregó Benítez Molas.
El listado completo incluye 24 funcionarios que cobraron viáticos en el primer cuatrimestre del año. Entre ellos, varios ocupan Subsecretarías o Direcciones, es decir, escalones intermedios de la administración pública. Lejos de tratarse de figuras políticas con alta exposición territorial, muchos de ellos deberían desempeñar tareas desde sus despachos.
“Si un subsecretario técnico está entre los que más viajan, hay dos opciones: o hay una mala asignación de funciones o se está usando la movilidad como mecanismo para complementar sueldos. Ambas cosas son graves”, sostuvo Benítez Molas.
La distribución del gasto plantea un serio interrogante sobre la transparencia y la lógica de la gestión actual. En vez de priorizar áreas sensibles o territoriales, los viáticos parecen haberse convertido en una vía paralela de ingresos dentro del gabinete. El hecho de que funcionarios técnicos cobren más que el propio gobernador en este rubro solo profundiza la sospecha de que el sistema se usa para otros fines.